Alimentación adecuada en Verano

 

Con la llegada del verano y el aumento de las altas temperaturas, debemos tener en cuenta lo importante que es estar bien hidratados y suficientemente nutridos. El calor hace perder agua y es imprescindible recuperarla. Si se va a practicar deportes de modo intenso, no se debe esperar a tener sed para beber; hay que aumentar el consumo de líquido antes, durante y después del esfuerzo físico.

Mantener una alta ingesta de líquidos es aconsejable en cualquier momento del día, ya que favorece la eliminación de residuos y evita el deterioro asociado a la deshidratación.

Es necesario además, consumir alimentos con alto contenido de agua en su composición. La fruta es una de las mejores formas de alimentarse en verano: es fácil de comer, se puede disfrutar a cualquier hora, como tentempié o desayuno, y permite elaborar deliciosos jugos y licuados. Además, en esta estación podemos encontrar una gran variedad: damascos, cerezas, duraznos, melón, sandía, ciruelas, frambuesas, higos, uvas y frutillas.

Entre las propiedades de las frutas, se destacan las nutritivas. Tienen una gran cantidad de vitaminas y minerales. Contienen un alto porcentaje de agua, en torno al 90%, son un tipo de alimento aliado contra las altas temperaturas. Tienen alto contenido en fibra, que tiene doble función: a nivel intestinal favorece la sensación de saciedad, puesto que la fibra tiende a hincharse y además evita el estreñimiento. A nivel sanguíneo disminuye ligeramente los niveles de colesterol. Son muy recomendables para reponer fuerzas cuando estamos agotados gracias a sus dosis moderadas de hidratos de carbono.

                                                                                         

Otro dato importante a tener en cuenta es que en verano se deben evitar las comidas con alto contenido graso o muy pesadas, ya que estas dificultan la digestión. Por el contrario, se deben consumir hidratos de carbono, que se encuentran concentrados en las pastas, el arroz, el pan, los cereales, las harinas, frutos secos, etc, sin olvidar las carnes, pescados, huevos y lácteos.

 

4 recetas de bebidas veraniegas:

 

- SORBETE DE LIMÓN

INGREDIENTES:

4 limones

2 vasos de agua

2 claras de huevo a punto de nieve

200gr. de azúcar y un poco de canela.

Una pizca de sal.

 

Paso 1: Se raspa la cáscara de un limón y se exprime el zumo de los limones. Se pone a cocer el agua con el azúcar y la canela y cuando empieza a hervir mantener cociendo durante unos minutos más, removiendo hasta formar un almíbar. Dejar enfriar.

Paso 2: Cuando está casi frío se mezcla con los zumos y la cáscara rallada, también se puede echar un poco de canela molida. Guardar en el congelador.
Paso 3: Cuando empieze a congelarse, se baten las 2 claras a punto de nieve bien firmes (con un pellizco de sal) y se mezcla con lo que hemos puesto en el congelador. Se vuelve a guardar en éste, y al cabo de 2 ó 3horas estará listo para servir!

Variantes: Se puede utilizar como variante una botella de cava y 6 limones. Como sustituto de la canela, hojas de menta.
Se sirve como postre digestivo y refrescante, o entre plato y plato, si la comida es abundante. El sorbete limpia nuestras papilas gustativas y nos prepara para un nuevo plato, siendo ideal para separar los de carne y pescado.

 

- TINTO DE VERANO  (típico español)

 Se realiza con vino tinto y gaseosa. Existen vinos sin alcohol por lo que se puede preparar una mezcla completamente "sin". Como también existen gaseosas endulzadas con edulcorantes, el contenido calórico es muy bajo.

INGREDIENTES:
Igual proporción de vino que de gaseosa
Hielo
Se mezclan vino y gaseosa bien fríos con un par de cubitos de hielo.

- CAFÉ CON HIELO

El café con hielo es una bebida muy socorrida por todos aquellos que no pueden renunciar a la cafeína. Dicen los expertos que el sabor amargo ayuda a combatir la sed mejor que el dulce de los refrescos.

INGREDIENTES:

un café muy cargado (el doble de lo normal)

azúcar o edulcorante

un par de cubitos de hielo

Hacemos un café lo más cargado posible, con el doble de grano de lo habitual para la misma cantidad de agua. Endulzamos al gusto y vertemos en un vaso con dos cubitos de hielo. En algunos bares se están sirviendo cubitos de hielo hechos con el mismo café, de manera que evitan que éste diluya su aroma a medida que los cubitos de hielo normal se van deshaciendo.

- LECHE CON CANELA Y LIMÓN

Esto es un refresco que se puede realizar de forma muy sencilla. Es recomendable emplear leche semidesnatada para que el sabor de la grasa no entorpezca el de la canela. Es un buen sustituto de la leche - aún siendo leche - para aquellos niños que no son muy afectos a la misma.

INGREDIENTES :

1 litro de leche semidesnatada
1 piel de limón
1 rama de canela

azúcar (opcional)

Pelamos el limón para obtener una tira de cáscara cuidando de no coger la parte blanca de la misma ya que es amarga. Por tanto la peladura deberá ser ligeramente transparente.
Añadimos la piel y la canela en rama a 1 litro de leche y la ponemos a calentar sin dejar de remover hasta que hierva. Vigilaremos para que en ese momento el cazo no desborde e inmediatamente reduciremos el fuego. El hervor se realiza para que la canela y el limón cedan su sabor a la leche. A continuación reducimos el fuego y mantenemos la mezcla sin dejar de remover unos diez minutos.
Sacamos del fuego, retiramos la rama de canela y la cáscara del limón, dejamos enfriar y luego colocamos en el frigorífico en una jarra, lista para servir. Si se desea, es posible que cada comensal añada azúcar o edulcorante para reforzar el sabor de los saborizantes. Al gusto!